El encanto de la vida.

La vida se convierte en un pedazo de hilo apunto de cortarse y otras veces es oro maziso que mira con arribismo a las personas, a veces predecible pero nunca en entendida. Solo le falta comprención, seria más docíl. Miro todos los días por la ventana y me encierro en el encanto de la vida, que hace una coincidencia totalmente indestructible al desprecio, que no solamente es inevitable, es vital. De lo contrario la vida solo seria imagenes que cruzan por delante de mis ojos y me hacen imaginar. El encanto de la vida es algo que se siente y que a traves del tiempo escapa hasta dejar el cuerpo convertido en persona.